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Es muy común que la insuficiencia venosa aparezca a causa de un mal funcionamiento de las válvulas que regulan el flujo de las venas. Aunque también puede deberse a un antiguo coágulo o trombo de sangre en las piernas, lo que impide que la sangre fluya con normalidad.

Pero, ¿qué es la insuficiencia venosa? Son aquellas dificultades que se presentan en el retorno venoso de la circulación de la sangre desde las piernas al corazón. En pacientes que sufren de insuficiencia venosa, las paredes de las venas se debilitan y las válvulas quedan dañadas, provocando que las venas queden llenas de sangre, produciéndose un estancamiento o enlentecimiento del flujo sangu íneo. Esto suele suceder, sobre todo, al estar de pie.

Insuficiencia venosa: síntomas

Antes de centrarnos en los síntomas de la insuficiencia venosa, es importante conocer qué puede llegar a causarla. Los factores de riesgo de esta patología son la edad, presencia de antecedentes familiares de varices, el peso, estar embarazada (por los cambios hormonales), haber sufrido trombosis venosa profunda en las piernas, permanecer sentado o de pie demasiado tiempo, la altura. El hecho de ser mujer también puede suponer un factor de riesgo, ya que puede estar relacionada con los factores hormonales y los cambios en los mismos durante menstruación, embarazo, menopausia.

La insuficiencia venosa se puede identificar por síntomas como el picor, hormigueo, hinchazón, dolor intenso, pesadez en las piernas, calambres, etc. Además, esta patología también es visible en la piel, donde se pueden observar zonas irritadas, sequedad, enrojecimiento, aparición de venas varicosas superficiales, endurecimiento de la piel en piernas y tobillos… La aparición de úlceras o heridas que tardan en sanar en las mismas partes del cuerpo antes mencionadas, también son un síntoma de la insuficiencia venosa.

Prevención de la insuficiencia venosa

Las medidas destinadas a la prevención van dirigidas a cambios en el estilo de vida para disminuir los factores de riesgo, como por ejemplo: la pérdida de peso, mayor práctica de deporte o la reducción de sodio en la dieta alimentaria. Todos estos factores le ayudarán a disminuir la presión en los miembros inferiores, y a mejorar la sintomatología. Existen algunos fármacos flebotónicos que pueden aliviar los síntomas en los estadios iniciales, mejorando el tono de la pared venosa y disminuyendo procesos inflamatorios locales. El uso de medias elásticas durante el trabajo o en periodos de bipedestación prolongada, así como en viajes largos, también ayudarán a reducir los síntomas y prevenir la aparición de la enfermedad.

Cómo tratar la insuficiencia venosa

Para el tratamiento de la insuficiencia venosa se emplea el uso de medias elásticas y reducir el tiempo en una misma posición (la frase: “quien mueve las piernas, mueve el corazón” sería muy apropiada en este caso). Es importante un estudio detallado mediante eco-doppler para diagnosticar la enfermedad en las fases más precoces o iniciales y proceder a su tratamiento si fuera necesario.

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